29/10/15

Apóstoles y Profetas. Columnas en el Pórtico de la Gloria. Catedral de Santiago.



    El Pórtico de la Gloria es una estructura arquitectónica escultórica situada a los pies de la catedral de Santiago, construido por el maestro Mateo entre los años 1168-1188. En él se muestran lecciones de catequesis y teología, como fundamentos religiosos vitales en la formación del cristiano medieval. Se harán comprender esos conceptos en las formas más sencillas posibles, como primeras lecciones y pasos que un creyente debe aprender. Allí están el castigo dde la gula, la lujuria, de la maledicencia, de la traición, de la embriaguez, entre otros vicios y condenas expuestos de forma elemental. Pero también está Cristo y los cuatro evangelistas, los ángeles portores de los instrumentos de la Pasión, la Gloria, el infierno, el pueblo judío, intentando completar el sencillo aprendizaje por la vista de lo elemental. Representaría a la teología como una búsqueda de Dios, concepción vital del hombre de la Edad Media. Sería el aprendizaje de los conocimientos de las cosas de la fe, la enseñanza de la religión y sus misterios por otros medios. La aplicación de la Biblia de piedra, sin texto para las gentes menos doctas. Lo más razonable para poder entender la escultura del Pórtico de Gloria sería hacerlo como la comprensión de una programación iconográfica basada en variados impulsos simbólicos evangélicos, todos en la línea de la Redención personal y universal.


    Pero el Apocalipsis, que es el programa principal de la escultura, no agota la capacidad simbólica teológica del Pórtico de la Gloria. Había más representaciones pedagógicas con o sin coordinación. De hecho, hemos pperdido toda su fachada exterior. Allí debería existir también un amplio programa escatológico, coordinado o no con el interior, pero de segura semejanza, intencionalidad y existencia.


    Por otra parte, hay escultura y programación teológica diferente en las columnas, los capiteles, las jambas de entrada a los arcos laterales, con un programa teológico distinto del Apocalipsis en el parteluz, donde empieza la genealogía y la vida familiar de Cristo (Jesé, Salomón, David, María), y finaliza en la exposición de la Trinidad como genealogía divina, seguida por la vida pública con las tentaciones, para acabar en la Pasión. En las columnas bajo los Apóstoles y profetas se muestra la representación del sacrificio de Isaac, y la resurrección de los muertos.


    Pero lo que siempre ha llamado la atención es la gran exposición de Apóstoles y Profetas, que en gran volumen y número encuadran todo el arco central. Están en alto, situados en columnas de elevación, y en forma diagonal que invita al espectador a hacer el recorrido hacia el interior. Desde la historia del arte se les reconoce como la expresión más viva y moderna del Estilo 1200, que se hizo presente a finales del siglo XII, como expresión de una nueva e inusitada naturalidad, que había de avanzar las formas góticas del siglo siguiente.


    No están representados todos los Apóstoles ni todos los Profetas, sino los más queridos y significativos.  Entre los segundos podemos encontrar a Moisés, Isaías, Daniel,Jeremías, y entre los primeros a los más queridos por Jesús, Pedro, Pablo (que no es apóstol, pero introducido en toda iconografía medieval por sus aportaciones evangélicas), Santiago, San Juan. Están entendidos como soportes físicos e intelectuales de la casa de Dios (La Gloria), como afirma San Pablo, Efesios 4, 11 “Y Él constituyó a unos apóstoles; a otros, profetas: a estos evangelistas; a aquellos pastores y doctores, para la perfección consumada de los santos, para la obra del ministerio; para la edificación del cuerpo de Cristo”. Los Profetas representarían el sostenimiento y la enseñanza de la antigua Ley, del Antiguo Testamento. Los Apóstoles la instrucción de la Nueva Alianza en la diáspora apostólica. Físicamente son el sostén de La Gloria, invitación diagonal a entrar en el Tabernáculo, en la iglesia catedral. Se ofrecen como intermediarios físicos, que lo fueron en ambos casos, pero también intermediarios espirituales por relación de las oraciones que los fieles les ofrecen. Ciertamente se pedía en Santiago que el Apóstol intercediese y concediese los dones que los peregrinos pedían, y lo hacían en la consideración de intermediario ante Dios, como se dice en una de las mochetas que sostienen el dintel del arco central “Estos son los triunfadores que fueron hechos amigos de Dios”.


    Su importancia ya estaba reflejada en San Pablo, Efesios,2, 19-20-21 “Por tanto, ya no sois extranjeros y huéspedes, sino conciudadanos de los santos y familiares de Dios, edificados sobre el fundamento de los apóstoles y de los profetas, siendo piedra angular en mismo Cristo, Jesús, en quien trabada se alza toda edificación para templo santo en el Señor, en quien vosotros también sois edificados para morada de Dios en el Espíritu”. Son por otro lado, el asentamiento definitivo, pero institucional de la palabra de Dios, la referencia escrita más importante de las sagradas escrituras, de ahí la importancia de su presencia en todas las fachadas monumentales del Arte Románico.

Su presencia en Santiago fue fundamental, como acompañamiento de Cristo en la relación del colegio apostólico que significaba y, símbolo de unión entre todos los cristianos. Se integraban en el Pórtico de la Gloria como la culminación y la finalización del mundo románico, la unificación de conceptos y culturas europeas acrisoladas a través de los siglos, donde las formas antiguas cristianas anicónicas y las posteriores icónicas dieron como resultado la mayor puerta simbólica de la humanidad.


Francisco Javier Ocaña Eiroa



Catedral de Santiago. Planta, según J.K.Conant. En rojo, el Pórtico de la Gloria



Catedral de Santiago. Sección del macizo occidental, según J.K.Conant




Distribución de la escultura




Pórtico de la Gloria. Dibujo de Arturo Franco Taboada




Arco central


Apóstoles



De izquierda a derecha. Pedro, Pablo, Santigo, Juan













Santiago y Juan


Pedro y Pablo
























Santiago y Juan
































Profetas


De izqquierda a derecha. Jeremías, Daniel, Isaías, Moisés












Isaías y Moisés



Jeremías y Daniel




























































Otros Apóstoles y Profetas